La PYME ante los procesos de globalización e integración regional

Se considera que la  PYME es motor del desarrollo. Se analizan y estudian las redes de cooperación empresarial internacionales promovidas por la Unión Europea, su comportamiento e impacto en el desarrollo local de terceros países. También se analiza la integración europea y su efecto en la PYME. Es de especial interés la resiliencia empresarial y el futuro del trabajo como mecanismos para aliviar la pobreza y mitigar los efectos del cambio climático.

Cooperación triangular y sector ambiental

 El sector ambiental ha surgido de una necesidad multilateral; debido a su carácter prescriptivo, las acciones han sido desarticuladas y con menor impacto  al  esperado. Mientras que  los agentes económicos involucrados en el nivel empresa no consideren  con el mismo nivel de importancia  que los gobiernos las medidas tomadas en pro del ambiente, difícilmente las actividades económicas alcanzarán su propia sustentabilidad. Apenas se desmantele algún programa o se elimine determinado estímulo fiscal, estas actividades desaparecerán con mayor velocidad con la que fueron creadas.


Redes locales de empresas e internacionales

 Las redes internacionales son importantes, no sólo porque éstas se consideran un medio para internacionalizar a la pequeña y mediana empresa (PYME) sino también porque prolongan el proceso de desarrollo endógeno provocado por las redes locales.


La importancia de la economía local para aliviar la pobreza

La revalorización de lo local a través de la creatividad en la economía naranja y el reconocimiento de los bienes culturales, la diversidad y el patrimonio inmaterial de las personas genera riqueza para el territorio. Esta transversalidad contribuye al alivio de la pobreza, la sostenibilidad y la competitividad de las empresas agroindustriales.


Calidad de vida y empresa

Un aumento en la calidad de vida no requiere necesariamente de un alto desarrollo  tecnológico. La internacionalización de las empresas tiene impacto positivo en la localidad cuando el mecanismo de cooperación se mantiene, aún en economías de baja renta y con obstáculos para la innovación tecnológica.


Futuro del trabajo e inclusión social

El entorno económico global plantea progresivamente la importancia de la creación de valor para adaptarse a la nueva realidad. También muestra que el futuro del trabajo está cada vez más determinado por el cambio climático, no solo por los avances tecnológicos. (Burch, 2010). Mientras tanto, la pandemia de covid19 enseña que los cambios trascendentales en la historia de la humanidad no radican, necesariamente, en la economía, ni en la tecnología. En este sentido, el futuro del trabajo se aborda como un gran desafío. Si bien existe una gran incertidumbre con respecto al futuro de la humanidad, es un gran desafío imaginar el empleo u otras formas de vida y satisfacción significativas para las personas.


Sistemas de aprendizaje y desarrollo local

El sistema de aprendizaje local promueve el autofinanciamiento, la adaptación constante al cambio y un mayor uso de los mercados internacionales en el caso de las empresas artesanales.


La microempresa es motor del desarrollo

La  microempresa como fenómeno diferente a la empresa no existe. El término micro, sinónimo de ‘muy pequeño’ como compositivo de la palabra empresa, se usa para indicar que dentro de un grupo de empresas existe una cantidad determinada de unidades que son muy pequeñas en comparación con las demás.


Contribución del marketing interno a la resiliencia

Son cuatro  dimensiones  del  marketing  interno  que  favorecen  a  la  resiliencia empresarial  y  a  la  inclusión  social:  1)  atracción  y  desarrollo  de  talento;  2)  cambio organizacional; 3) Lideraazgo y empoderamiento; 4) comunicación para la creación del conocimiento y la motivación


Capacidades dinámicas para la resiliencia

El financiamiento familiar, la maquinaria industrial adaptada, las herramientas de manufactura propia y vidriado cerámico, el conocimiento (práctico y tradicional), la reputación internacional, los valores ancestrales y relacionales contribuyen a las capacidades dinámicas. Las competencias que también contribuyen son: aprender a hacer y aprender a aprender. Se concluye que las capacidades funcionales, culturales y posicionales fomentan las estrategias para la resiliencia.